CIELO Y AMARILLO
Una combinación por demás llamativa gracias a la calidez del amarillo; el cual no sólo logra un balance perfecto con lo frío del azul, sino que también lo llena de luz y vitalidad. Una de las grandes ventajas de este dúo es que ofrece una extensa variedad de matices, cualidad que te permitirá emplearlo en cualquier espacio, desde la cocina, la sala o incluso el dormitorio; el reto está en encontrar el equilibrio perfecto para no saturar y producir un efecto negativo. En las estancias de uso común apuesta por los tonos como Candado 188 02, pinta una sola superficie de azul y deja el resto de blanco, lucirá dinámico y no perderás luminosidad. Los muebles, puertas y suelos de madera armonizan con las tonalidades de azul y amarillo.
OSCURO Y TIERRA
Los tonos terrosos forman parte de la gama de los cálidos, que parecieran haberse creado para combinar con el azul, ambos son tonalidades que por sí solas expresan mucho, por lo cual debes tener cuidado en utilizar las cantidades adecuadas, dándole preferencia a los pastel si se trata de un espacio interior. Esta romántica pareja es una de las preferidas en la decoración vintage, por lo que si buscas un estilo dulce y sofisticado el azul Nautilus 180-07 y el coral Coctelera 082-03 son tu mejor opción para una salita de estar o el recibidor.
MAR Y ESCARLATA
Si lo que buscas es un ambiente mucho más atrevido y lleno de energía, prueba una combinación con rojo Ardiente 090-07, un tono lleno de fuerza y sentimientos positivos que por su efecto estimulante resulta ideal para recámaras juveniles donde se requiere un ambiente lleno de vitalidad. Sin embargo, si lo que buscas son resultados más cálidos y apacibles, lo puedes lograr al hacer convivir el rojo con gamas de azul medio. Atrévete a crear espacios modernos y fuera de lo común, pinta tus muros con Vitral 167-02 y contrasta con un sillón o sillas de color rojo vibrante, el resultado creará una sensación de entusiasmo que te sorprenderá, tanto que se convertirá en tu estancia favorita y la de tus invitados. El azul y el rojo pueden convivir de muchas maneras.