Deja que su esencia afrutada eche raíces en tu hogar e inspire los mejores momentos.

Por: Sandra Díaz H.
Fotos: iStock, Megapixl, Stocsy

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Acentúa la decoración de tu espacio favorito y expresa tu forma de ser con pequeños detalles de color.

Su nombre no es el más glamoroso, pero ni falta le hace, porque este color complementario que resulta de la calidez del rojo, el equilibrio del verde y el efecto sedante del azul, lleva en su ADN el don para inspirar un estado constante de bienestar, confort y felicidad. Por algo vive su mejor momento y se encuentra entre los favoritos de 2017, para vestir las pasarelas de moda y ambientar los showrooms de decoración; así que no te quedes atrás, y acompáñanos a materializar en tu casa la belleza femenina y atípica de este tono festivo de la familia de los violetas.

Si tienes dudas para adoptarlo en tus espacios, te animará saber que lo mismo en días de calor o en las noches de frío, la gradación rosada de Pitaya B1- 14 se transforma a través de la luz natural y artificial, logrando una melodiosa composición cromática que recuerda la dulzura de las flores y la sensación purificante de la naturaleza.

Vitalidad, confort y espontaneidad se fusionan en un matiz de origen cactáceo

Pitaya B1-14

Vitalidad, confort y espontaneidad se fusionan en un matiz de origen cactáceo que sabe de armonía visual, de revivir días de sol, parque y helados; de paseos por ciudades o pueblos mágicos, y emotivos itinerarios de arte. No es casualidad que Pitaya B1-14 sea parte de “Legado”, la primera de las cuatro paletas de Color Trends de 2017.

Una tendencia que se inspira en la cultura y el arte como reflejo de nuestras historias, tradiciones, experiencias, viajes y memorias. Potencia al máximo la gracia de este tono combinándolo con materiales como algodón, cuero, barro, maderas de roble, haya y cerezo; cerámica, vidrio y terciopelo. Prueba en tejidos, muros e ¡incluso en tus labios!; deja que conviva con verdes puros, negro, blanco roto y neutros.